Cuando hablamos de cocinas luminosas y amplias, la elección entre cuarzo y granito se convierte en una decisión crucial. Personalmente, siempre me ha fascinado cómo el cuarzo ha ganado popularidad en los últimos años. Este material, que es en un 93% compuesto de cuarzos naturales, ofrece una dureza y resistencia impresionantes. Además, esas encimeras de cuarzo suelen ser más uniformes en color y textura debido a su proceso de fabricación. Yo diría que para aquellos que buscan un aspecto moderno y brillante, el cuarzo es una excelente opción. Por otro lado, el granito, que tiene una estructura completamente natural, presenta una variedad única en cada pieza, lo que le da un carácter más exclusivo a la cocina.
He leído en varias ocasiones que el coste del cuarzo puede variar entre 60 a 100 euros por metro cuadrado, mientras que el granito suele estar en un rango similar, pero a menudo se encuentra ligeramente más económico. Sin embargo, al final, la diferencia de precio se reduce, y es más una cuestión del estilo que uno prefiera. Hablando con amigos arquitectos, me han comentado que el granito sigue siendo elegido por su cualidad de ser una de las piedras naturales más duraderas y resistentes al calor. Tal vez por ello, muchos chefs prefieren trabajar sobre superficies de granito.
Un dato fascinante es que según algunos expertos del sector de la construcción, las encimeras de cuarzo requieren menos mantenimiento porque son no porosas y resisten mejor las manchas. ¿Qué pasa con la limpieza? Con una simple pasada de un paño húmedo y jabón suave, el cuarzo queda impecable. Ahora bien, el granito, aunque más resistente al calor, necesita ser sellado periódicamente para mantener su integridad y prevenir manchas, lo que podría ser un inconveniente para quienes buscan comodidad total.
Recuerdo una revista de diseño que mencionaba cómo marcas como Cosentino han revolucionado el mercado con sus innovaciones en superficies de cuarzo, promoviendo sus beneficios en términos de durabilidad y variedad de diseños. Esto subraya lo mucho que el cuarzo se ha establecido como una de las principales opciones en cocinas modernas. Sin embargo, uno no puede dejar de lado el encanto atemporal del granito, que siempre aporta esa conexión con la naturaleza debido a su origen orgánico.
Una de mis amigas que es diseñadora de interiores mencionó que sus clientes a menudo preguntan, "¿cuál es la mejor opción para mi cocina?" Ella suele responder que depende tanto del uso que se le dará como del gusto personal, destacando que tanto el cuarzo como el granito ofrecen beneficios únicos. Con una vida útil que puede superar fácilmente los 25 años si se cuidan bien, ambos materiales realmente superan las expectativas en cuanto a durabilidad. Para más información sobre la durabilidad del cuarzo, recomiendo echar un vistazo a este enlace.